Después de presentar nuestros proyectos individualmente y frente a nuestros "jefes", estos debían decidir qué obras iban a meter en la exposición final. Quién estaba dentro, quién estaba fuera. Blanco y negro. Bueno y malo. Un sí o un no. Un hola un adiós. Cruel dualidad. Me quedé fuera.
Publicaron unas listas en un blog (así, en plan anónimo, ni siquiera hicieron acopio del coraje necesario para decirlo por teléfono) con la gente que sí que iba a aportar su obra, y yo no aparecía. Habrá sido un error, pensé. Al artista "jefe" de mi color no le moló mucho lo que hice. No está en mi onda ¿sabes? Él se lo pierde, fuah. Igualmente, va a ser una mierda, ya lo sabía desde el principio, no va a ir ni Dios, sólo lo hice, yo qué sé, porque me obligaron ¿no? si tío, a la mierda. Al pedo. Mira, menos chorradas en las que pensar, que tengo ya bastantes proyectos y eso. Esto no me ha afectado, moving on. No, no pensé eso, ya me esperaba el resultado.
Como hay que dar al público lo que el público demanda, pues también voy a hablar sobre dos ejemplos de comisariado.
Para los profanos os comento que un comisario es un tipo o una tipa que organiza una exposición. Con todo lo que eso conlleva. Que si sois del mundo del arte ya lo sabréis, y si no lo sois, pues no importa mucho, es una cosa de estas que se desarrollan desmesuradamente en la especialización característica del sistema capitalista. Mejor os leéis por qué la llamita del fogón es de color azul. O como el cielo, por qué es azul y al ocaso se enrojece. Por qué amanece la aurora temprana con dedos de rosa.
El primer ejemplo es bastante curioso a mi parecer. Curioso porque se trata de un comisario que ha realizado una idea de comisariado que se le ocurrió a otra persona. ¿Plagio? no... esa persona es concretamente Carlos III, y estoy hablando del proyecto de Miguel Ángel Blanco (comisario). Este proyecto está en el museo del Prado, del 19 de noviembre hasta el 27 de abril de 2014. El proyecto son una serie de intervenciones en la colección permanente. Estas intervenciones consisten en muestras sacadas del museo de Ciencias Naturales que interactuan con algunos cuadros. Algunas plantas, un esqueleto de serpiente, pajarillos disecados, etc... acompañando obras de Velázquez, el Bosco, Durero, etc...
Esta idea está sacada de los proyectos de Carlos III, un apasionado del arte pero también de las ciencias naturales. Proyectó un conjunto expositivo que incluía el observatorio, el Jardín Botánico y el Prado en el mismo plano, con una inscripción que rezaba "Naturaleza y arte bajo un mismo techo".
Es esta frase la que puede resumir este curioso (a mi parecer, insisto) comisariado. Claro que no se ha llevado a cabo todo el proyecto de Carlitos, simplemente se ha evocado, añadiendo además ciertos aspectos interactivos (entre obras) y otra enriquecedora manera de ver la exposición que tantas veces hemos visto (jajajajaa) (realmente fue la primera vez que iba al Prado desde que tengo memoria) (es para llorar, no para reírse).
En el programa lo venden muy exagerado. Luego no hay tanta interacción y no enriquece taaanto la nueva contemplación. Se podría haber hecho mejor, haber cogido pájaros y plantas como los que de verdad salen en los cuadros, y buscar una mejor interacción entre animal/planta/cuadro. Pero muy guai el texto que ponen sobre varios toros que salen en varios cuadros a lo largo de la hisotria como "El rapto de Europa", acompañado de un toro del museo de C. Naturales que es idéntico.
http://www.museodelprado.es/exposiciones/info/en-el-museo/historias-naturales
El otro ejemplo está sacado de una exposición del museo Reina Sofía: Formas biográficas, construcción y mitología individual. Me pareció una idea de comisariado muy confusa. O a lo mejor la idea está clara pero luego te confunde al explicarla y te confunde aún más si te adentras en la exposición. El proyecto es de Jean-Francois Chevrier y estará ahí desde el 27 de noviembre hasta el 31 de marzo de 2014.
Me adentré sin saber nada, a ver si era capaz de hacerme una idea del comisariado a base de ver obras y de leerme los textitos que pegan en la pared. Empecé creyendo que era sobre minimalismo. Luego pensé que iba sobre la individualidad. Y luego me hice un lío y no sabía qué pensar. Luego me leí el folleto. Vale. Ahí se aclara un poco la cosa, y hace que se conecte un poco el individualismo con la autentica idea de comisariado, que era, en efecto, el individualismo, pero desde un punto de vista que yo no había conseguido captar en la exposición.
Es sobre el término de "la vida y la obra" del majísimo Vasari, un crítico de arte que a mí me hace mucha gracia. Pero. PERO. Creo que hay un problema. Me da la impresión de que se ha hecho un texto muy majo que han impreso en folletos que te dan a la entrada del museo y a la entrada de la exposición. Ahí te cuentan la idea de comisariado. Y luego pues han puesto obras y obras por un tubo para apoyar todo el texto del folleto, pero me parece que la relación texto-obra es muy pobre. Sobran cosas, faltan cosas. Bueno, faltar no sé si faltan, pero sobrar está claro que sí. Hay obras de autores que llaman mucho la atención. Es lo que yo llamo (me lo acabo de inventar) una exposición mainstream. Han puesto algunos nombres destacables en el mundillo del arte para que así la gente vaya a verlo, al margen de si tiene cabida en la idea de comisariado.
Gente como Louise Bourgeois, Gerard Richter, Alberto Giacometi y (mad) Max Ernst.
Doy margen a que yo no haya captado las sutilezas que unen esas obras y "la vida y el artista" (que para mí es la frase clave de la idea de comisariado) quizás por lo poco progresivo de las explicaciones. Pero oso a decir eso, que no es una exposición 100% coherente. Ha-piss!!
http://www.museoreinasofia.es/exposiciones/formas-biograficas
sábado, 7 de diciembre de 2013
jueves, 21 de noviembre de 2013
PABLO como la leche parte tres
Continuamos con esta apasionante saga.
El lunes 18 de noviembre (ноябрь en ruso) quedamos en la trasera todos los grupos de todos los colores para exponer breve e individualmente nuestra aportación al proyecto.
Uno a uno, color por color. El objetivo era darle un uso no convencional a un color y que funcionara igualmente. Supongo que era fácil de entender, aunque no tan fácil de llevar a cabo. Aún así, muchos de los trabajos fueron fruto de no haber entendido bien qué había que hacer. Algunos sí que lo habían entendido pero eso no hizo que fuera mucho mejor.
-El color azul desarrolló una idea conjunta: la de el azul como recuerdo. El profesor nos explicó que relacionaron el azul como un color característico de lo etéreo. Del cielo, el mar, como difumina el aire a las montañas cuando las vemos de lejos, etc... el azul como algo etéreo y lejano. ¿Pues qué es etéreo y lejano a nosotros? Nuestro primer recuerdo. Me parece un desarrollo estupendo. Pero me gustaría recordar que había que hacer todo lo contrario. Habría que haber hecho trabajos dándole un uso muy muy material y cercano al azul. Pero bueno. Todos los miembros de ese grupo hicieron un trabajo dentro de ese marco.
-El color verde: las propuestas eran más individuales, pero se pudo ver que abundaba el uso de la tecnología, coherente con el estilo de trabajo del artista que está al cargo del grupo. También abundó mucho la peña que no hizo nada.
-Blanco: el mío. También libertad de acción, aunque dado el artista que orquestaba nuestro grupo, había que darle mucha importancia al discurso. Al blablablá vamos. Pero bien. Creo que fue uno de los grupos más coherentes con la idea del proyecto y los trabajos presentados me gustaron de los que más (no estoy hablando del mío, claro).
-Rojo: no me acuerdo de mucho. Pero creo que en general trabajos un poco sosos, si bien coherentes con la idea del proyecto.
-Los del color amarillo: dios mío. Nadie se enteró de nada y encima uno nos castigó con una exposición larga e incoherente.
Pero bueno, fue una sesión muy agradable y entretenida. Había mucha más gente apuntada que no presentó nada al final. Una lástima.
El lunes 18 de noviembre (ноябрь en ruso) quedamos en la trasera todos los grupos de todos los colores para exponer breve e individualmente nuestra aportación al proyecto.
Uno a uno, color por color. El objetivo era darle un uso no convencional a un color y que funcionara igualmente. Supongo que era fácil de entender, aunque no tan fácil de llevar a cabo. Aún así, muchos de los trabajos fueron fruto de no haber entendido bien qué había que hacer. Algunos sí que lo habían entendido pero eso no hizo que fuera mucho mejor.
-El color azul desarrolló una idea conjunta: la de el azul como recuerdo. El profesor nos explicó que relacionaron el azul como un color característico de lo etéreo. Del cielo, el mar, como difumina el aire a las montañas cuando las vemos de lejos, etc... el azul como algo etéreo y lejano. ¿Pues qué es etéreo y lejano a nosotros? Nuestro primer recuerdo. Me parece un desarrollo estupendo. Pero me gustaría recordar que había que hacer todo lo contrario. Habría que haber hecho trabajos dándole un uso muy muy material y cercano al azul. Pero bueno. Todos los miembros de ese grupo hicieron un trabajo dentro de ese marco.
-El color verde: las propuestas eran más individuales, pero se pudo ver que abundaba el uso de la tecnología, coherente con el estilo de trabajo del artista que está al cargo del grupo. También abundó mucho la peña que no hizo nada.
-Blanco: el mío. También libertad de acción, aunque dado el artista que orquestaba nuestro grupo, había que darle mucha importancia al discurso. Al blablablá vamos. Pero bien. Creo que fue uno de los grupos más coherentes con la idea del proyecto y los trabajos presentados me gustaron de los que más (no estoy hablando del mío, claro).
-Rojo: no me acuerdo de mucho. Pero creo que en general trabajos un poco sosos, si bien coherentes con la idea del proyecto.
-Los del color amarillo: dios mío. Nadie se enteró de nada y encima uno nos castigó con una exposición larga e incoherente.
Pero bueno, fue una sesión muy agradable y entretenida. Había mucha más gente apuntada que no presentó nada al final. Una lástima.
Gracias al tipo que lo organizó, Jorge, y a los artistas por acogernos y a Lila por obligarnos a ir bajo amenazas.
yo, presentando mi trabajo frente a un público entregado
jueves, 7 de noviembre de 2013
PABLO APRENDE A CAMINAR CAMINANDO
El lunes y el martes 4 y 5 respectivamente se desarrolló en la Trasera un taller (workshop, ya know) sobre performance. Se llamaba A caminar se aprende caminando. Pues se puede decir que como poco fueron coherentes con el título. No soltaron mucha chapa sobre qué es y teorías acerca del tema. Nombraron a algunos artistas precursores, algunas acciones notables y sobretodo contaron sus experiencias con chavales de instituto en talleres sobre lo mismo. Todo muy ceñido a la experiencia. Muy bien. Me gustó a pesar de mi rechazo a la mayoría de performances que veo. No es que esté predispuesto negativamente hacia la performance de manera automática, pero sí que es verdad que la mayoría de performances me provocan un enconado rechazo. Me tocan mazo las bolas. Sobre todo el tipo ese que empujaba un cacho de hielo hasta que se deshizo. No saberme su nombre es parte de mi desprecio. Y, aprovecho aquí y ahora, porque este no salió en A caminar se aprende caminando, para declarar mi también desprecio al arte Gregor Schneider y todo lo que le circunda. Que también debería incluir en "todo lo que le circunda" a ese público anulado que se traga y se excita con su típico y patético discurso y que en el fondo es el que le ha hecho llegar a donde ha llegado. Pero es que algunos de mis compañeros de clase son de esta condición y... ¡os quiero, dadme un "like" al post!
Concluyo agradeciendo a Christian y al otro por el curso y a Lila por llevarnos. Respect.
Concluyo agradeciendo a Christian y al otro por el curso y a Lila por llevarnos. Respect.
martes, 5 de noviembre de 2013
PABLO NECESITA PISTOLAS
Hola. ¿A qué se debe este título? Pues a que el pasado miércoles 2 de mayo de 2012 fui al concierto que dio el grupo This town needs guns en la sala Wurlitzer Ballroom en Madrid.
Yo y mi amigo F. llegamos con la idea de que el precio de la entrada eran 20 euros, y resulta que no...que costaba en realidad 8 euros. De cine. De puta madre, vamos, joder, una ganga, he visto grupos mucho peores por más dinero (Agent Orange).
Sobre This town needs guns puedo decir que, para empezar, ese nombre tan vehemente no tiene nada que ver con la música que hacen. Son canciones con estructuras atípicas, llenas de contratiempos y tiempos bien raros. Aún cuando tocan en 4/4 cuesta seguirlo. Tienen un sonido muy original para todos esos capullos que dicen que no se puede hacer nada nuevo en la música hoy en día. La guitarra y la batería llenan de detalles (sin saturar) unas canciones de más de tres minutos pero que no se hacen largas, sobretodo porque huyen de la típica canción "intro+estrofa+estribillo+estrofa+solo+estrofaparaterminar". La voz ralla un poco al principio, pero al final te das cuenta de que también es cojonuda, como encaja con las complejas líneas rítmicas, algo raro de ver en este género (mathrock). Todo es cojonudo en ese grupo.
Antes de This town tocaron unos tipos de Madrid que hacen un rollo tipo Slint, con efectillos varios y canciones más o menos progresivas. Se llaman FFORDD (para no pagar derechos a la marca de coches, han añadido esa F y D de más). El bajista tenía una técnica malísima, el guitarrista era bastante bueno y tenían a un muchacho de color con un Mac haciendo sonidos (en mi opinión un poco prescindibles). No se me hicieron pesados, y eso es mucho dado el tipo de música que tocan.
Y luego tocaron This town. El guitarrista principal es más alucinante aún de lo que esperaba, y lo mismo el batería. Son todos unos musicazos del carajo. Como hace poco se les ha ido un músico, que además tocaba la trompeta, pues algunas de las canciones más épicas (Elk) no las tocaron. Además, el concierto era para presentar nuevo disco, así que sólo tocaron tres conocidas: "If I sit...", "Baboon" y "Chinchilla". La gente les pidió "26 is dancier than 4" pero el bajista/guitarrista nuevo no se la sabia. Lástima, es mi favorita.
Pero en resumen, alucinante. Lo mejor: como me sobraron 12 euros, me pude comprar una camiseta con la portada del primer album, "Animals".
domingo, 3 de noviembre de 2013
PABLO como la leche parte dos
El jueves 31 fui a la Trasera a reunirme con el resto de gente que había escogido el color Blanco para lo de Negro como la leche.
El artista (Ivailo) abrió el diálogo. Ganando confianza con el tiempo acabamos hablando cada uno de lo que teníamos en mente, amparados por la libertad técnica y teórica que nos brinda Ivailo.
Las conclusiones las iremos desarrollando de aquí hasta el 18, día en el que entregaremos nuestras pieces of art para que las seleccionen y distribuyan en el espacio La casa franca.
Continuará.
El artista (Ivailo) abrió el diálogo. Ganando confianza con el tiempo acabamos hablando cada uno de lo que teníamos en mente, amparados por la libertad técnica y teórica que nos brinda Ivailo.
Las conclusiones las iremos desarrollando de aquí hasta el 18, día en el que entregaremos nuestras pieces of art para que las seleccionen y distribuyan en el espacio La casa franca.
Continuará.
miércoles, 30 de octubre de 2013
PABLO COMO LA LECHE, parte uno
Martes 21. En la trasera nos reunimos y asistimos a la presentación de Negro como la leche, un proyecto más de La casa franca, un espacio en el que se hacen diversas cosas artísticas periódicamente.
Nos explicaron de qué va este espacio y luego nos hablaron del proyecto que han llevado a cabo junto con la universidad Complutense. Se asignaron colores a varios artistas que habían traído invitados. El tipo que lleva La casa franca asigna estos colores según su propio criterio y los artistas se reunirán con grupetes de estudiantes (yo y mis compañeros) para trabajar con lo que les haya tocado. Cada grupo trabaja con un artista.
Esta entrada es "parte uno" porque aún me tengo que reunir con el artista y mi grupo. El artista es un joven que tiene el color blanco asignado. Así que me tocará hacer una obra de arte relacionada con el blanco. Es la película de la trilogía de Krzysztof Kieslowski en la que van a Polonia, el resto transcurren en Francia. ¿Qué emoción no? No.
Bueno sí, un poquito.
Nos explicaron de qué va este espacio y luego nos hablaron del proyecto que han llevado a cabo junto con la universidad Complutense. Se asignaron colores a varios artistas que habían traído invitados. El tipo que lleva La casa franca asigna estos colores según su propio criterio y los artistas se reunirán con grupetes de estudiantes (yo y mis compañeros) para trabajar con lo que les haya tocado. Cada grupo trabaja con un artista.
Esta entrada es "parte uno" porque aún me tengo que reunir con el artista y mi grupo. El artista es un joven que tiene el color blanco asignado. Así que me tocará hacer una obra de arte relacionada con el blanco. Es la película de la trilogía de Krzysztof Kieslowski en la que van a Polonia, el resto transcurren en Francia. ¿Qué emoción no? No.
Bueno sí, un poquito.
domingo, 27 de octubre de 2013
Pablo acude al edificio Telefónica a alimentar discurso para su futuro proyecto
Fui un día tal que otros, soleado con alguna nube despreocupada, aire limpio de polen y otras caquillas en suspensión aérea porque el día anterior había llovido, al edificio de Telefónica. Quedé con mi tobárish R. para ver, en principio, la exposición de Ryoji Ikeda. Fui recomendado por algunos de mis compañeros de clase (gracias, chicos), porque este tipo hace cosas con matemáticas, y mi proyecto a desarrollar tiene que ver también con esto.
En la introducción decía que Ikeda encuentra su inspiración en el mundo de las matemáticas, del que toma su naturaleza racional, abstracta y su representación gráfica.
Se puede aventurar, en mi ignorancia, que no se parece mucho su proyecto al mío. Digo en mi ignorancia porque lo que había era unas proyecciones de secuencias (aleatorias?) de rayas, puntos, algunas animaciones tridimensionales a base de puntos y de fondo, unos soniditos que había compuesto él seguramente, y que puede que obedecieran a ciertos patrones, que estuviera programado junto con todo lo demás, o que fuera también un poco random. No sé. Sí que podría decir que el componente matemático se puede encontrar en que todas esas proyecciones están hechas a base de logaritmos. Pero ahí me quedo.
Me dejó un poco fría la exposición. Cuando voy a ver cosas artísticas que estén relacionadas con la matemática, me gusta que sea un poco más patente, intuitivo incluso. Jaja... suena como si hubiera ido a más exposiciones de este tipo. Pero no es verdad.
Ya que estábamos ahí nos vimos una exposición que había en la planta superior sobre fotografía. Lo presentaban al principio como un recorrido histórico del principio de la fotografía como algo artístico y algunas corrientes y las subcorrientes que generaron. Pero en mi desconocimiento, sólo ví fotos enmarcadas con el nombre del autor en una esquinita. No pude apreciar nada de recorrido histórico. Pero bueno, culpa mía por mi desconocimiento.
Después bajamos a otra que había, también de fotografía. Esta era de un sólo autor, Terry O´neill. Más documental que la otra, habían dispuesto en un dudoso orden fotos bastante remarcables. Fotos de gente famosa básicamente, nada de paisajes o experimentales. Retratos de David Bowie, Churchill o Tina Turner. Insisto en que el orden en el que habían puesto las fotos me pareció un despropósito. Ciertamente habría quedado mucho mejor cronológicamente.
Y aún me queda la última exposición, que es la permanente que tienen en el edificio, que hace un recorrido por la historia del teléfono. Cabe destacar sobre todas las cosas, los cables para las líneas transoceánicas. Un monstrenco cilíndrico cargado de condensadores, electroimanes y otras soserías, de un palmo de diámetro y como mi estatura de largo, un metro ochenta y cinco. No, es broma. Yo mido menos. Y el cilindro también, o sea, que es broma lo de que mida uno ochenta y cinco, no lo de que mide como yo de alto. De cada extremo del cilindro sale un grueso cable que protege dos finos cilindros concéntricos de cobre. Este cable une un cilindro con otro a través de todo el recorrido que hay, por ejemplo, desde la costa andaluza hasta alguna de las islas Canarias.
http://www.tfo.upm.es/ImperialismoWeb/Zweig.htm
Y ya, adiós.
En la introducción decía que Ikeda encuentra su inspiración en el mundo de las matemáticas, del que toma su naturaleza racional, abstracta y su representación gráfica.
Se puede aventurar, en mi ignorancia, que no se parece mucho su proyecto al mío. Digo en mi ignorancia porque lo que había era unas proyecciones de secuencias (aleatorias?) de rayas, puntos, algunas animaciones tridimensionales a base de puntos y de fondo, unos soniditos que había compuesto él seguramente, y que puede que obedecieran a ciertos patrones, que estuviera programado junto con todo lo demás, o que fuera también un poco random. No sé. Sí que podría decir que el componente matemático se puede encontrar en que todas esas proyecciones están hechas a base de logaritmos. Pero ahí me quedo.
Me dejó un poco fría la exposición. Cuando voy a ver cosas artísticas que estén relacionadas con la matemática, me gusta que sea un poco más patente, intuitivo incluso. Jaja... suena como si hubiera ido a más exposiciones de este tipo. Pero no es verdad.
Ya que estábamos ahí nos vimos una exposición que había en la planta superior sobre fotografía. Lo presentaban al principio como un recorrido histórico del principio de la fotografía como algo artístico y algunas corrientes y las subcorrientes que generaron. Pero en mi desconocimiento, sólo ví fotos enmarcadas con el nombre del autor en una esquinita. No pude apreciar nada de recorrido histórico. Pero bueno, culpa mía por mi desconocimiento.
Después bajamos a otra que había, también de fotografía. Esta era de un sólo autor, Terry O´neill. Más documental que la otra, habían dispuesto en un dudoso orden fotos bastante remarcables. Fotos de gente famosa básicamente, nada de paisajes o experimentales. Retratos de David Bowie, Churchill o Tina Turner. Insisto en que el orden en el que habían puesto las fotos me pareció un despropósito. Ciertamente habría quedado mucho mejor cronológicamente.
Y aún me queda la última exposición, que es la permanente que tienen en el edificio, que hace un recorrido por la historia del teléfono. Cabe destacar sobre todas las cosas, los cables para las líneas transoceánicas. Un monstrenco cilíndrico cargado de condensadores, electroimanes y otras soserías, de un palmo de diámetro y como mi estatura de largo, un metro ochenta y cinco. No, es broma. Yo mido menos. Y el cilindro también, o sea, que es broma lo de que mida uno ochenta y cinco, no lo de que mide como yo de alto. De cada extremo del cilindro sale un grueso cable que protege dos finos cilindros concéntricos de cobre. Este cable une un cilindro con otro a través de todo el recorrido que hay, por ejemplo, desde la costa andaluza hasta alguna de las islas Canarias.
http://www.tfo.upm.es/ImperialismoWeb/Zweig.htm
Y ya, adiós.
domingo, 20 de octubre de 2013
Pablo va a la Monte Young (exposición temporal en el Reina Sofía)
De nuevo con la clase de Proyectos movimos nuestro culo (no lo he contado pero el primer día de clase dimos una caminata larga laarga, me dolían las rodillas al terminar y no sabía dónde estábamos)(en Parla?)(en Aranjuez?). Fuimos al Reina Sofía con la intención de ver una exposición que tienen ahora sobre este año tan maravilloso para la innovación artística que fue 1961, para que tomáramos cinco fotos que tuvieran relación con nuestro proyecto. Y a parte de las fotos, caray, que la exposición en sí nos ayudara a matizar nuestro discurso. ¿No?. Sí.
Nada más empezar hay un texto que te explica de qué va el asunto. Como ya me ha pasado otras veces, lo que leo, me imagino, y luego veo una vez que entro son cosas nada parecidas. Pero nada más entrar me dí cuenta de que iba a ser una de estas exposiciones en las que lees mucho y ves poco.
Había una recopilación de cosas hechas por ciertos artistas clave que estuvieron en mayor o menor medida física o temporalmente conectados. No me gustó casi nada de lo que ví. Todo el discurso centrado en lo mucho que innovaron y exploraron los nuevos campos que la nosequé iba nosecuantos. El blablablá se les daba muy bien, pero de ahí a la práctica se les fueron las fuerzas. Me fijé que la mayoría de los escritos tenían una fecha que precedía a la producción artística.
Había también algunas instalaciones que servían para performances. Una rampa de madera tenía varias cuerdas colgadas, venían un par de personas y se ponían durante un rato a pasarse de una lado al otro. O una cuerda colgando del techo y un tipo se encaramaba ahí y se quedaba un rato contemplando.
También había una puerta que daba a un pasillo que se iba estrechando cada vez más. Y la llamada "Escultura vertical" de Robert Morris. ¡Gracias, oh gran Morris, por haber bendecido a nuestra civilización con esta gran muestra de ingenio, virtuosa imaginación, dedicación, ejecución! Amigos, no os voy a poner una foto de esa escultura. Simplemente imaginaos una columna, un prisma rectangular de color gris, puesto verticalmente.
Sí, estaréis pensando que qué fácil es ridiculizar ese tipo de manifestaciones artísticas, llevándolas al absurdo de una manera tan superficial. Tú en tu casa, en tu ordenador, en el siglo XXI, con todo dado, y esa gente abriendo caminos, explorando los límites del arte, el lenguaje, la imagen, el oh, el Ah!, ¡Caramba! ¡Sublime! ¡Yo! ¿Ello? ¿Superyo? ¿Superyoko ono?
Si partimos del discurso pretencioso que tenía ya de por sí ese grupo de artistas y le sumamos la montaña de objetos absurdos que hicieron y que han amontonado entre las paredes del Reina Sofía, los dedos se me escapan y sólo quieren teclear la M, la I, la E, la R, la D y la A. Y el "Mayús+1".
Tampoco me gustaron las piezas musicales que componían. No sé, todo una mierda. Y joder, que era 1961, decir que "hay que entender la época y el contexto" no sirve de escudo. Estamos hablando del año en el que se fundaron los Beach Boys.
Otra cosa que no me gustó, pero esto supongo que es parte de quien monta la exposición, es que haya tanto blablablá genérico, y luego, por ejemplo, no expliquen en qué se basaban para llamar a una pintura "Pintura aleatoria". Sobre todo a unos que hablaban de abstracción matemática. Me emocioné (cuando lo leí) porque mi proyecto en principio va de eso. Pero luego vi lo que habían hecho y me quedé como estaba. O porque era una mierda o porque faltaba un poco de explicación.
No quiero aburrir con más charla unilateral sin antítesis, que es muy onanista y muy fácil, y para eso ya está el porno. Adiós
Nada más empezar hay un texto que te explica de qué va el asunto. Como ya me ha pasado otras veces, lo que leo, me imagino, y luego veo una vez que entro son cosas nada parecidas. Pero nada más entrar me dí cuenta de que iba a ser una de estas exposiciones en las que lees mucho y ves poco.
Había una recopilación de cosas hechas por ciertos artistas clave que estuvieron en mayor o menor medida física o temporalmente conectados. No me gustó casi nada de lo que ví. Todo el discurso centrado en lo mucho que innovaron y exploraron los nuevos campos que la nosequé iba nosecuantos. El blablablá se les daba muy bien, pero de ahí a la práctica se les fueron las fuerzas. Me fijé que la mayoría de los escritos tenían una fecha que precedía a la producción artística.
Había también algunas instalaciones que servían para performances. Una rampa de madera tenía varias cuerdas colgadas, venían un par de personas y se ponían durante un rato a pasarse de una lado al otro. O una cuerda colgando del techo y un tipo se encaramaba ahí y se quedaba un rato contemplando.
También había una puerta que daba a un pasillo que se iba estrechando cada vez más. Y la llamada "Escultura vertical" de Robert Morris. ¡Gracias, oh gran Morris, por haber bendecido a nuestra civilización con esta gran muestra de ingenio, virtuosa imaginación, dedicación, ejecución! Amigos, no os voy a poner una foto de esa escultura. Simplemente imaginaos una columna, un prisma rectangular de color gris, puesto verticalmente.
Sí, estaréis pensando que qué fácil es ridiculizar ese tipo de manifestaciones artísticas, llevándolas al absurdo de una manera tan superficial. Tú en tu casa, en tu ordenador, en el siglo XXI, con todo dado, y esa gente abriendo caminos, explorando los límites del arte, el lenguaje, la imagen, el oh, el Ah!, ¡Caramba! ¡Sublime! ¡Yo! ¿Ello? ¿Superyo? ¿Superyoko ono?
Si partimos del discurso pretencioso que tenía ya de por sí ese grupo de artistas y le sumamos la montaña de objetos absurdos que hicieron y que han amontonado entre las paredes del Reina Sofía, los dedos se me escapan y sólo quieren teclear la M, la I, la E, la R, la D y la A. Y el "Mayús+1".
Tampoco me gustaron las piezas musicales que componían. No sé, todo una mierda. Y joder, que era 1961, decir que "hay que entender la época y el contexto" no sirve de escudo. Estamos hablando del año en el que se fundaron los Beach Boys.
Otra cosa que no me gustó, pero esto supongo que es parte de quien monta la exposición, es que haya tanto blablablá genérico, y luego, por ejemplo, no expliquen en qué se basaban para llamar a una pintura "Pintura aleatoria". Sobre todo a unos que hablaban de abstracción matemática. Me emocioné (cuando lo leí) porque mi proyecto en principio va de eso. Pero luego vi lo que habían hecho y me quedé como estaba. O porque era una mierda o porque faltaba un poco de explicación.
No quiero aburrir con más charla unilateral sin antítesis, que es muy onanista y muy fácil, y para eso ya está el porno. Adiós
miércoles, 16 de octubre de 2013
Espacio Trapecio, debate
El lunes 7 de octubre de 2013 fuimos con la clase de Proyectos a un debate organizado en el Espacio Trapecio por el colectivo Banquete. Este colectivo está formado por antiguos alumnos de mi facultad y habían invitado a personalidades importantes para que participaran en el debate, como una chica que había terminado la carrera y trabajaba de profesora, alguien del mundo de las galerías y Selina, la vicedecana de extensión universitaria. Por ejemplo.
El debate no me aportó ninguna nueva conclusión, pero sí me sirvió para ver más puntos de vista diferentes a mis compañeros de clase, que los tengo muy vistos ya. También había gente de otras facultades, de filosofía por ejemplo, opinando sobre la facultad. Interesante.
Cabe resaltar también el diverso surtido de aperitivos que habían dispuesto sobre una mesa cerca del círculo de debates. Me dió un poco de apuro y sólo probé unos lacitos y unas galletas. Nada casero, claro. También había unos bollitos con chocolate por dentro. Y cosas para beber, como agua, café y té (creo). Pero no bebí nada. No tenía sed.
Las entradas quedan muy sosas si no se adornan con una foto. Como no tomé ninguna pues pongo una de un dibujo mío así me hago algo de promoción.
Adiós.
jaja, qué gratuito
El debate no me aportó ninguna nueva conclusión, pero sí me sirvió para ver más puntos de vista diferentes a mis compañeros de clase, que los tengo muy vistos ya. También había gente de otras facultades, de filosofía por ejemplo, opinando sobre la facultad. Interesante.
Cabe resaltar también el diverso surtido de aperitivos que habían dispuesto sobre una mesa cerca del círculo de debates. Me dió un poco de apuro y sólo probé unos lacitos y unas galletas. Nada casero, claro. También había unos bollitos con chocolate por dentro. Y cosas para beber, como agua, café y té (creo). Pero no bebí nada. No tenía sed.
Las entradas quedan muy sosas si no se adornan con una foto. Como no tomé ninguna pues pongo una de un dibujo mío así me hago algo de promoción.
Adiós.
jaja, qué gratuito
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